jueves, 19 de marzo de 2015

La rueca dorada

Hace mucho tiempo en un reino muy lejano, cuyo nombre era El dorado, vivían dos reyes muy felices. Pasados unos años tuvieron una preciosa niña, llamada Aurora. Esta era la más bella del reino, con un cabello hermoso y dorado como los rayos del sol, su piel era tan hermosa que reflejaba el brillo de sus ojos, azules como la más hermosa luna. El reino vivía en paz y armonía, hasta que una primavera, la reina tras una larga enfermedad murió, dejando el reino triste y desolado ante tal noticia. La reina antes de morir dejo un regalo muy especial a su pequeña, este regalo le sería entregado por el rey cuando cumpliera 18 años, y al rey le hizo prometer que jamás permitiría que la pequeña Aurora fuera infeliz.

Pasaron los años, y la pequeña Aurora se fue haciendo cada vez más mayor, y cada vez más hermosa como su madre. El rey cada vez más mayor, se preocupaba por el futuro del reino, y que su hija, al cumplir los 18 años, debería elegir pretendiente digno para casarse y dar continuidad al reino. Ese día tan esperado llego, y Aurora cumplió sus 18 años, el rey no falto a la promesa que hizo a su querida esposa, y le entregó ese regalo tan especial. Aurora maravillada por su contenido no dudo ni un segundo, se colgó la cadena de oro con el anillo de casada de su madre, y una joya muy especial con forma de rueca dorada que contenía un líquido en su interior. Ese día fue muy especial, y asistieron a palacio toda la realeza de los alrededores.

Mientras tanto, en el reino el rey decidía acerca del futuro de Aurora, y le busco un pretendiente. Cuando llego la primavera, el rey sentó a Aurora al lado suyo y le comunico que se casaría con un apuesto príncipe, y que todo estaba arreglado para que se celebrara la boda al acabar la primavera. Aurora horrorizada ante lo que estaba escuchando, le hizo una petición a su padre, antes de casarse el príncipe debería de regalarle el vestido más magnifico del mundo, dorado como sus cabellos y que reflejaran el brillo de sus ojos. El rey transmitió al apuesto príncipe la petición de su hija. Pasaron los meses y el príncipe se presento en palacio con el vestido más bello que jamás se había visto en el reino. Aurora al probárselo quedo sorprendida de que el príncipe hubiera conseguido tal vestido, era dorado como su cabello y reflejaba el azul de sus ojos, todos quedaron maravillados de tal hermosura. El príncipe al verla dijo que ahora ya se podían casar, pero la princesa dijo que no antes de que acabara la primavera, a lo que el príncipe accedió.

Aurora desesperada porque no quería casarse con aquel joven príncipe, salió esa misma noche corriendo de palacio en la oscuridad de la noche, llorando desconsolada y con aquel hermoso vestido, atravesó el bosque con su veloz caballo. El caballo cansado, tiro de repente a Aurora y salió galopando, quedando asustada y sin saber qué camino tomar para ir lo más lejos posible de aquel príncipe. Aurora de rodillas suplico al cielo que la ayudara a escapar. De repente, de su cuello salió una luz dorada, era la joya en forma de rueca dorada, cuyo contenido brillaba. Atónita ante ese hecho abrió la joya despacio, el contenido salió veloz, Aurora sin pensárselo salió corriendo tras la luz dorada. Corrió a través del bosque hasta encontraste con un palacio, y allí la luz dorada desapareció. Temerosa ante lo que allí podía encontrar, decidió entrar en palacio por las cocinas, no sin antes cubrir su cabello con arcilla que encontró en el suelo, desapareciendo de ese modo la hermosura de su cabello dorado. Y se cubrió la cara con barro para que así no la reconocieran, al igual que aquel maravilloso vestido, lo mancho de barro para que quedara sucio y feo. Se acerco al palacio y la recibió el jefe del servicio, el cual la ofreció cobijo a cambio de trabajar en la cocinas de palacio. La joven limpiaba platos, barría y fregaba las cocinas de palacio ante la atenta mirada del cocinero, que no la dejaba respirar y la trataba muy mal.

Un día se celebro en palacio una gran fiesta, todo el mundo estaba atareado, incluso el cocinero no paraba de trabajar. Ante tanto trabajo, el cocinero decidió darle una tarea más a Aurora, y le encargo la preparación de la sopa, destinada al rey del palacio. Aurora preparo con sumo cuidado la sopa, ya que el cocinero la advirtió de que si cometía algún fallo la expulsaría de palacio. Mientras tanto en el comedor de palacio, comenzaron a servir la sopa preparada por Aurora, todos los comensales quedaron maravillados con lo buena que estaba la sopa. Al día siguiente el rey, que aun recordaba esa grandiosa sopa, entró en cocina para ver quien había sido tan magnífico cocinero esa noche. El jefe de cocinas, ante tal reconocimiento no dudo en ponerse todo el merito de aquella sopa. Pero el rey observo en una esquina a una joven nueva y se acerco a Aurora que estaba en una esquina barriendo. La observo y el jefe de cocinas enseguida exclamo: “es nueva en palacio y mi ayudante en cocina”.

El rey, que ya sospechaba que su cocinero no podía haber hecho aquella sopa, la pidió que preparara otra sopa como la de anoche, y ella tímidamente accedió. Cuando el rey volvió a probar aquella magnifica sopa quedo sorprendido y pidió que la joven pasara a ser su chef personal. Todas las noches la hacía sentarse a su lado en la mesa y comer con ella, Aurora sorprendida, ya que jamás había visto a rey igual, le pregunto una noche el porqué de su cercanía a los sirvientes del castillo. El rey la contesto: “porque yo soy rey del reino pero vosotros sois iguales que yo y merecéis respeto y reconocimiento”. Aurora desde esa noche empezó a ver al rey con otros ojos, quedando maravillada por su persona.

Una noche de principios de primavera se celebro una fiesta muy especial, todas las realezas irían a palacio, ya que el joven rey debería escoger pretendienta para casarse. Esa noche, el rey no paraba de pensar en Aurora, se había enamorado de ella, y la hizo una petición especial, que estuviera presente como de costumbre en el comedor junto a él. Aurora preocupada no sabía qué hacer, no paraba de ir de un lado a otro de sus aposentos pensando que hacer, y mirando su colgante se percato de una pequeña inscripción en la joya con forma de rueca dorada, en ella leyó: “cuando más lo necesites su luz te guiara a tu amor verdadero”. Sorprendida, se acordó de aquel día en el bosque en el que la luz la guió a aquel palacio, y entonces decidió limpiar aquel precioso traje que le fue regalado por el príncipe que su padre había elegido, se lo puso y se limpio su hermoso pelo. Al mirarse al espejo, apareció de nuevo aquella hermosa niña que una noche huyo de su palacio para no casarse con un príncipe al que no conocía. Al bajar por las escaleras, el rey quedo impresionado y se acerco corriendo a Aurora para asegurarse de que era la misma joven con la que había pasado tanto tiempo. El joven rey, que había celebrado aquella fiesta para elegir futura mujer, decidió en ese instante cual iba a ser su prometida. Durante la cena en el comedor el rey se levanto y ante el silencio de todos los invitados anuncio que se casaría con Aurora, ya que no había mujer más buena y más digna de ser su reina que ella, claro estaba si ella aceptaba a ser su mujer. Todos los invitados quedaron desconcertados, ya que Aurora no era princesa ni reina y era una simple sirvienta, pero nadie podía poner en duda la decisión del rey. Aurora se levanto y de pronto se escucho una voz desgarradora. El padre de Aurora había asistido a aquella fiesta, llorando salió corriendo a abrazar a Aurora. Aurora llorando comenzó a contar todo lo ocurrido en ese año que había desaparecido de su casa. El padre de Aurora, durante ese tiempo en el que Aurora había desaparecido, no había dejado de pensar en aquellas palabras que su mujer fallecida le había hecho prometer, y que no había cumplido, en ese momento no dudo en faltar a esa promesa y jamás dejo que Aurora fuese infeliz, permitiendo esa boda y apoyándola en aquello que Aurora deseaba.

Al finalizar la primavera los dos jóvenes se casaron, con la alegría de todos y la unión de dos reinos magníficos. Aurora decidió casarse con el anillo que su madre le había regalado, ya que era muy especial para ella y la había ayudado a encontrar a su amado con esos regalos tan especiales que le había hecho. Desde ese momento todos fueron felices y comieron perdices.


Y colorín colorete este cuento se ha acabado.


Adaptación del cuento “Toda clase de pieles”

He adaptado este cuento para adaptado un poco a las circunstancias de los tiempos que corren y para poder usarlo posteriormente para trabajar en el aula con actividades. Esta adaptación se puede contar como si fuera un cuentacuentos, o incluso en un pequeño teatrillo de marionetas ya que no tiene muchos personajes implicados.

Las adaptaciones que he realizado han sido las siguientes:

La reina muere un día al finalizar la primavera y no le entrega los regalos a la princesa, sino que le dice al rey que los entregue cuando esta cumpla los 18 años. De esta manera he dado pie a la continuación del cuento, ya que la princesa debe casarse con un príncipe. Otro cambio introducido, ha sido que el rey no se casa con nadie, sino que se preocupa de cuidar a su hija y de hacerla feliz. Me ha parecido ideal este cambio, ya que actualmente en clase nos podemos encontrar con niños que solo tienen uno de los padres, o con padres divorciados, y es una manera de incluir en un cuento este aspecto, ya que habitualmente los cuentos suelen tener ambos progenitores juntos.

Los regalos que la madre le hace a la princesa los he acortado a dos, dándoles de esta manera un protagonismo especial a lo largo del cuento a cada uno de ellos. El primero lo he usado para que Aurora encontrara a su amor verdadero, y lo pudiera conocer, y el segundo para que usara este como alianza el día de su boda para casarse con su amado. También he acortado los regalos que a petición de la princesa le pide a su padre para casarse con aquel príncipe que él decide. El regalo ha sido solo uno y ha sido un vestido especial que le permitirá poder usarlo para volver a ser ella misma, en la fiesta final que se celebra, de este modo el padre la reconoce y el príncipe queda maravillado.

Mi adaptación del cuento está enfocado en cuanto a que la princesa no desea casarse con un príncipe que no conoce y que su padre la propone, por eso huye. Aurora conoce en otro palacio a otro príncipe, con el cual pasa mucho tiempo y le conoce. No se enamora de él por su trono, ya que a ella le da igual todo eso ya que es princesa, se enamora de él, por lo cercano que es a la gente, es un rey bueno, amable y que la trata como una persona igual a pesar de ser una sirvienta. El rey se enamora de ella también por su persona, por como es y por todo ese tiempo que pasan juntos conociéndose, sin que nadie tome la decisión de cuál será su reina, por eso al final a pesar de no ser princesa decide casarse con ella. También me ha parecido idóneo el concederle también la aceptación de Aurora ante esa petición que el rey le hace de matrimonio, ya que ella también tiene que decidir si quiere o no, es una manera también de demostrar que es un rey bueno y respetuoso.

Esta historia la contaría a niños de 5 años, ya que a esta edad se puede trabajar con ellos los conceptos de respeto y de amor que se pretende transmitir en el cuento. Después de contarlo se podría trabajar diversas actividades, se puede realizar una pequeña asamblea para hablar entre ellos que les ha parecido, y que den sus opiniones. Pueden realizar dibujos de cómo sería ese vestido hermoso para ellos.



10 comentarios:

  1. Me parece una adaptación estupenda, Sandra, sobre todo porque has conseguido crear una versión más sencilla y con menos adornos, que puede resultar mucho más atractiva para niños de 5 años. Considero que has elegido muy acertadamente la edad del público al que puede ir dirigida la historia, los alumnos de 5 años pueden entender bastante bien la historia.

    Has respetado los motivos principales del cuento, así como los arquetipos y personajes esenciales. Están presentes los reyes, la princesa, el hombre del que se enamora, la huida del propio hogar, los regalos y el matrimonio feliz.

    Sí creo que deberías darle un repaso a la ortografía, he encontrado bastantes errores, y, aunque en principio el cuento es para contarlo en clase de manera oral, veo importante que, como maestras, aprendamos a escribir sin faltas ortográficas (por aquello de que es complicado enseñar lo que uno no aplica o sabe todavía).

    Me gusta especialmente la propuesta de actividades que has incluido al final de la adaptación porque, efectivamente, este cuento puede dar mucho juego en el aula. Estaría genial que, como dices, pudiera representarse a través de un teatrillo con marionetas. A los más pequeños les resultaría muchísimo más divertido y seguro que, de esta forma, interiorizarían mejor el relato y podrían darle rienda suelta a su creatividad.

    Un abrazo!

    Nuria Pérez.

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    1. Gracias por tu aportación Nuria.

      A lo referente a la ortografía, ya he corregido las faltas que había, gracias por haberte dado cuenta, ya que después de tantas horas se me pasaron algunas tildes, que debido al despiste y no al no saber escribir o no querer aplicarlo, se me pasaron por alto incluso al pasar el corrector para evitarlo. Gracias y la próxima vez seré más concienzuda a la hora de corregir mis textos.

      Un saludo.

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    2. Es un buen comentario, Nuria, pero lee lo que le he comentado a Sandra.

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  2. Hola Sandra!
    Me parece una adaptación bastante acertada para la edad que has elegido ya que a esta edad creo que los niños están preparados para escuchar un relato largo.
    Por otro lado has logrado crear esa intriga del "¿qué pasara?" y así asegurarte que los niños estén atentos hasta el final del cuento.
    Has dejado ciertos retozos del cuento original, como el vestido, la cadena con la rueca, la figura del príncipe y de la princesa que has sabido enlazar muy bien. Por otro lado has cambiado la historia de que el rey quisiera casarse con su hija, ya que los peques de clase quizás no hubieran llegado a entender, por ello has logrado una adaptación muy buena.
    El lenguaje que has utilizado ha sido cercano, más moderno y que puedan entender mejor los niños.

    En definitiva o has hecho una buena adaptación, y que además has sabido acortar el cuento de una manera más amena y atrayente para los niños de esa edad.

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  3. Hola Sandra!
    Al leer tu cuento he pensado lo mismo que Rut, me gusto mucho pero sobre todo la intriga que consigues con tu relato creo que atrapará a los niños/as al contarles el cuento y eso es muy importante, conseguir que disfruten de un relato oral a la edad de cinco años, puede basarse, entre otras cosas en conseguir esa intriga.
    Considero muy apropiada la edad para la que has realizado la adaptación.
    Muchas gracias, he disfrutado con la lectura de tu cuento!
    Gema

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    1. Gracias Gema por tu aportación. Me alegra que hayas disfrutado leyéndola jeje.

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    2. Te digo lo mismo que a Rut, Gema.

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  4. Coincido en lo que dicen tu compañeras, Sandra: has sabido crear una historia que mantiene perfectamente la magia y la intriga de los relatos folclóricos. El planteamiento te ha quedado genial, los cambios han permitido mantener todos los motivos y todas las funciones que había en la historia de la que has partido. Pero el problema de tu historia es el personaje de Aurora. Has convertido un rol de heroína activa (que lleva, en todo momento las riendas de lo que le ocurre (excepto en el momento en que la encuentran y la llevan al castillo) en un rol de heroína pasiva.
    Aurora no aprende a vivir sola en el bosque como Toda clase de pieles (es una de las pruebas de su viaje iniciático) sino que, en el momento en que queda desamparada, una luz mágica la dirige a un castillo.
    Aurora no tiene que luchar por conquistar astutamente a un príncipe... el rey se acerca a ella, se enamora de ella, la lleva al baile... y se le declara. Ella no hace absolutamente nada a partir del planteamiento de la historia.
    No me parece mal que cambies el rol del cocinero, aunque no veo el motivo. Tampoco me parece mal que el padre aparezca al final y la apoye. Es una especie de anexo al verdadero final feliz (la boda). Pero si cambias tanto a la heroína, no es una adaptación, sino un cuento diferente inspirado en Toda clase de pieles.

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